martes, 27 de diciembre de 2011

Yo nunca seré salvaje

Ese domingo todo iba a ser especial,
Cada persona que miraba era mi madre,
Pero la belleza era sinónimo de quirófano,
Íbamos a hacer fotografías a las escaleras del casino,
Nunca nos llegamos a entretener,
Alguna juventud de esas de los poemas nos dejó de mirar,
Formando con sus huecos la nada.

Seguí leyendo a Kavafis, por fin entendía a un poeta,
¿Por qué no me lo mostraron en párvulos?,
Ah sí, me olvidaba que la infancia debe ser dura,
Y la vida… y por las tardes nos ensuciaban los dedos de chocolate,
Para que no escribiéramos,
Y nos acostaban pronto, para que no decidiéramos los sueños,
Pero ahora tenemos a Kavafis y por tanto/tango, juventud,
Que se arranca la piel para ser infancia y cambiar novias,
Por canicas y problemas por halos platónicos:
Padres, ciudades, playas. El ensueño de una noche sin estaciones,
Reitero, Kavafis, poemas.

Germán Piqueras

































No hay comentarios: